Este 26 de septiembre, el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, en una gira por el estado de Veracruz, volvió a sacar su refrito discurso de que no habrá nada de entrega de apoyos a organizaciones sociales como "la antorcha mundial" porque había piquete de ojo, etcétera; sin embargo, tras 2 años de su gobierno en el que no se ha cansado de decir que "vamos bien", no hay duda de que la realidad que siempre se impone, señala que no es así y por lo tanto, millones de mexicanos, cansados de las mentiras de la 4T, salen a decirle que no están de acuerdo con su política y le señalan sus errores, pero además, porque de una reacción superficial sino porque realmente, el nulo apoyo está afectando a los que en campaña dijo que ayudaría, es decir, los miles de mexicanos que se encuentran en pobreza.Esto es así porque, por ejemplo, de nueva cuenta y sobre todo en una situación tan difícil como lo es la pandemia, sale a relucir cómo se encuentra la entidad oaxaqueña, pues de acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), se agrega que, en 39 municipios del estado, uno de cada dos habitantes, es decir, más del 50% de la población, no tiene garantizada la alimentación cotidiana.
Esto último, indica que, en cuatro años de 2010 a 2014,en promedio, 285 oaxaqueños al día se sumaron a la estadística de personas que no tienen garantizada su alimentación y en ese lapso, poco más de 417 mil oaxaqueños se sumaron a las filas de las personas que no tienen asegurado el alimento diario.Es decir, en Oaxaca, la cifra del hambre creció 40% en cuatro años.Sin embargo, esto no es todo pues las cifras más alarmantes las poseen tres municipios: San Bartolomé Ayautla, situado en la región de la Cañada, del distrito de Teotitlán: 78.4%; en San Cristóbal Amatlán, situado en la Sierra Sur en el distrito de Miahuatlán: 76.5% y en San Martín Itunyoso, municipio mixteco del distrito de Tlaxiaco, 74.2%; donde 3 de cada 4 oaxaqueños padecen de carencia alimentaria.
Según los mismos datos del Coneval, en 2010, al menos un millón 22 mil oaxaqueños tenían al hambre como compañera cotidiana; para 2012 la estadística oficial de Coneval señala que 221 mil oaxaqueños engrosaron las filas de la escasez; un crecimiento de 17.8%; el bienio siguiente, de 2012 a 2014, el crecimiento fue de 15.7%, al sumarse alrededor de 195 mil personas.Y, es en nueve los municipios donde más de dos terceras partes de su población padecen hambre; además de los mencionados, San Miguel Chicahua; Yaxe, Huautepec, San Pedro Coxcaltepec, Cántaros, Santa Cruz Acatepec y San Miguel Huautla, donde más del 66% de sus habitantes no tienen un plato para llevarse a la boca.
La capital del estado, Oaxaca de Juárez, a pesar de ser el centro económico y polo de atracción de oaxaqueños del interior del estado, tampoco es una comunidad ajena a la carencia alimenticia y los estragos causados ésta.Con una población cercana a los 350 mil habitantes, datos ofrecidos por Coneval señalan que uno de cada seis, aproximadamente 54 mil personas, carecen de alimento asegurado.Incluso el 7% vive materialmente por debajo de la línea de bienestar mínima pasan hambre.
A estos casos particulares, habríamos que agregar una decena de municipios, donde dos de cada tres personas no tienen garantizado un plato en la mesa para comer, así hablamos de San Bartolomé Ayautla, San Cristóbal Amatlán, San Martín, Itunyoso, San Miguel Chicahua, Yaxe, Huautepec, San Pedro Coxcaltepec Cántaros, Santa Cruz Acatepec, San Miguel Huautla y Santa María la Asunción
Todos estos datos, los oaxaqueños los debemos tener presente porque, en el 2021 vendrán las elecciones donde elegiremos a diputados federales, cuestión que debemos reflexionar a fondo, porque muchos de los que hoy son mayoría, siguiendo la política de AMLO han dejado en el abandono a millones de mexicanos que hoy pasan hambre y más en esta pandemia, pero no solo han negado la alimentación y apoyo, sino cómo relaté al inicio de este escrito, esos que se dicen llamar de la "esperanza", no se han cansado de calumniar la organización popular, como en el caso del Movimiento Antorchista, Organización que no solo habla sino en la realidad ha demostrado que trabaja para ayudar al pueblo trabajador, llevando así, grandes obras a pueblos y colonias marginadas, pero no solo eso, en esta pandemia cuando el gobierno federal negó un plan de alimentación para los más necesitados, no desistieron de la lucha y lograron gestionar ante el gobierno estatal, algunas despensas que sirvieron para alivianar aunque sea mínimamente, el hambre en miles de hogares oaxaqueños.
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